El desastre tras el Huracán Kathrina saltó las alarmas para mejorar la protección frente a inundaciones en Nueva York. Junto con el cierre de Fres Kills como antiguo vertedero, se marca un antes y un después en Staten Island. De un 40% de Industrias y Suelos Baldíos a un futuro escenario con más del 75% destinado a espacios libres, recreación y zonas residenciales. Para garantizar la seguridad y fomentar el turismo, se pretende reordenar el lugar creando una gran isla que sirva de dique natural y rompeolas a gran escala. Los movimientos de tierras se emplearán para crear microtopografías donde realojar las viviendas a niveles por encima de las crecidas y reordenando la movilidad favoreciendo un sistema de fuga compuesto por calles verdes impermeables. Una reserva natural rica en ecosistemas como sus estuarios únicos, así como bosques y cultivos del litoral. Las acciones se harán por fases. La protección de las inundaciones costeras debe hacerse en la línea de costa para minimizar el impacto de las olas. Lo primero serán los diques, las escolleras, que además favorecen la aparición de nuevos organismos y vegetación marina, y el aporte de arena reforzando así el sistema dunar frente al choque. La restauración de estanques y humedales mejora la retención de agua y sedimento. Elevarse y extender la línea de costa con la creación de nuevas playas frente a un 2050 cuando suframos un aumento del nivel del mar. Un sistema de Bulkheads y presas hacen de soporte de la nueva ciudad más próxima al agua, funcionan como puentes y nos permiten controlar el flujo del canal. La inundación debe formar parte del sistema tanto natural en la lógica de los propios humedales como la inclusión de terrazas inundables compatibles con actividades deportivas o grandes aparcamientos.
Master Arquitectura del Paisaje, UPC
Mariana Gómez y Rodrigo Shelley
Staten Island, New York (USA)
2015